Senza acqua e Senza verità

Iroel Sánchez https://lapupilainsomne.wordpress.com

Ho cercato in rete e vi è consenso nei giudizi della scienza medica sul tema, tutti i riferimenti coincidono: un essere umano può sopravvivere solo da tre a cinque giorni senza bere acqua e ci sono alcuni casi eccezionali, in condizioni ideali, da dieci a dodici giorni.

Ma in un’altra scienza, la comunicazione, ciò cambia e si può arrivare al doppio. Il quotidiano di Miami El Nuevo Herald ha pubblicato, il 10 agosto scorso, che l’ “oppositore” cubano Guillermo Fariñas “da 22 giorni senza bere acqua o ingerire alimenti”. Un altro sito chiamato Cibercuba -una versione per il web del famigerato ZunZuneo che regala anche ricariche per cellulare per diffondere le sue “notizie” e, come il suo antecedente anch’esso made in USA, mescola temi neutri con la più evidente propaganda politica- supera l’Herald e parla di 24 giorni! in “sciopero della fame e della sete fino a quando il “governo smetta di torturare””.

L’agenzia spagnola EFE ha detto in un dispaccio, del 29 luglio, che Fariñas era quindi “una settimana in sciopero della fame e della sete” nella stessa data che il quotidiano di Madrid El País con un testo del suo corrispondente in … Messico. Ma El Pais -nonostante la sua militanza contro il governo cubano- apparentemente si consultò meglio e solo parlò di “sciopero della fame”. Stranamente entrambi non sono tornati a toccare la questione fino al momento della stesura di questo articolo, anche se sono passate più di due settimane, e se è vero quello che hanno pubblicato il 29 luglio, il protagonista della loro notizia dovrebbe essere ora molto più grave di allora.

L’emittente del governo USA verso Cuba, Radio e TV Martí, ha riferito l’11 agosto la visita di rappresentanze diplomatiche di USA e Spagna che “s’interessarono alla salute dello scioperante e per le richieste che pianifica nel suo sciopero della fame e della sete”. Radio e TV Martí non chiariscono se entrambe le rappresentanze spiegarono a Farinas il trattamento che, nei loro paesi, ricevono gli scioperanti della fame che include l’alimentazione forzata nel caso dei prigionieri in luoghi come il carcere, che mantiene Washington, a Guantanamo contro l’opinione pubblica mondiale o le migliaia di casi di tortura documentati in quei paesi, a differenza di Cuba, dove non vi è alcuna prova. In questo senso si può cercare la parola tortura nella relazione di Amnesty International -un’organizzazione per nulla ideologicamente affine al sistema cubano- su USA e Spagna e vedere che, mentre nell’Isola non appare una sola volta in quelli si menziona il termine, rispettivamente, in 10 e 18 occasioni.

Dal momento che tutti i media citati in questo testo si riferiscono ad occasioni precedenti in cui Guillermo Fariñas realizzò scioperi della fame, linko qui due post pubblicati in questo blog su quelle situazioni al fine di contribuire a porre fine allo sciopero di pubblicare verità che realizzano queste entità apparentemente informative.

• Cuba en los medios: una reunión es una huelga y el Gandhi cubano es apadrinado por el mayor terrorista de Occidente
• Guillermo Fariñas y El Nuevo Herald: “¿Como si fuéramos…?” (+ video)

La nueva huega de Fariñas en los medios: Sin agua y sin verdad

Iroel Sánchez

He estado buscando en la red y hay consenso en los criterios de la ciencia médica sobre el tema, todas las referencias coinciden: un ser humano puede sobrevivir solo de tres a cinco días sin tomar agua y hay algún caso excepcional en condiciones ideales de diez a doce días.

Pero en otra ciencia, la comunicación, eso cambia y se puede llegar al doble. El diario de Miami El Nuevo Herald publicaba el pasado 10 agosto que el “opositor” cubano Guillermo Fariñas “lleva 22 días sin tomar agua o ingerir alimentos”. Otro sitio llamado Cibercuba -una versión para la web del tristemente célebre ZunZuneo que también regala saldo para celulares por difundir sus “noticias” y que como su antecedente también made in USA mezcla temas neutros con la más evidente propaganda política- le sube la parada al Herald y habla de ¡24 días! en “huelga de hambre y sed hasta que el “Gobierno deje de torturar””.

La agencia española EFE dijo en un despacho del 29 de julio que Fariñas llevaba entonces “una semana de huelga de hambre y sed”, en la misma fecha que el periódico madrileño El País con un texto de su corresponsal en… México. Pero El País -a pesar de su militancia contra el gobierno cubano- al parecer se asesoró mejor y solo habló de “huelga de hambre”. Extrañamente ambos no han vuelto a tocar el asunto hasta el momento en que escribo este artículo, aun cuando han pasado más de dos semanas y de ser cierto lo que publicaron el 29 de julio el protagonista de su noticia debería estar ahora mucho más grave que entonces.

La emisora del gobierno de Estados Unidos hacia Cuba Radio y TV Martí, reseñó el 11 de agosto la visita de representaciones diplomáticas de EEUU y España quienes “se interesaron por la salud del huelguista y por las demandas que plantea en su huelga de hambre y sed”. Radio y Tv Martí no aclara si ambas representaciones explicaron a Fariñas el trato que en sus países reciben los huelguistas de hambre que incluye la alimentación obligatoria en caso de los prisioneros en lugares como la cárcel que mantiene Washington en Guantánamo en contra de la opinión pública mundial o los miles de casos de tortura documentados en esos países a diferencia de Cuba donde no hay pruebas de ninguno. En ese sentido se puede buscar la palabra tortura en los informes de Aministía Internacional -una organización para nada afín ideológicamente al sistema cubano- sobre Estados Unidos y España y comprobar que mientras en el de la Isla no aparece una sola vez en aquellos se menciona el término en 10 y 18 ocasiones respectivamente.

Ya que todos los medios de comunicación aludidos en este texto se refieren a ocasiones anteriores en que Guillermo Fariñas realizó huelgas de hambre, enlazo a continuación dos posts publicados en este blog sobre aquellas situaciones con el fin de ayudar a concluir la huelga de publicar verdades que llevan a cabo esas entidades supuestamente informativas.